FUNDACIÓN DÉDALO

Errores comunes como tener una contraseña muy débil, con el fin de recordarla fácilmente, o usar la misma contraseña en todos los sitios es uno de los problemas más importantes a la hora de estar seguros en la red.

Es por ello que no solamente es importante tener una contraseña por servicio, sino que además esta deberá ser bastante segura. Esto no quiere decir que debamos fiarnos totalmente pues aun teniendo una contraseña que tarde en "hackearse" miles de millones de años mediante la técnica del diccionario, puede ser saltada en tan solo unos minutos. Esto es porque las claves que se han extraído de servicios "hackeados" a lo largo del tiempo, se publican en Internet para que cualquier persona tenga acceso a ellas.

Por lo general algunas webs suelen tener “medidores de seguridad” en el registro que nos indican si la contraseña es lo vulnerable o no. Esto funciona de manera que la web paga para tener acceso a los directorios de contraseñas "hackeadas" y donde comprueba si nuestra contraseña está ahí o no.

Usar generadores aleatorios de contraseñas no está mal, ya que no tienen en cuenta palabras reales, sino que unen caracteres, tanto letras del alfabeto como números, así como también caracteres especiales del tipo “?” o “#”. Dentro del propio generador suele haber una opción para elegir el tipo de seguridad que queremos, la longitud, si usa mayúsculas o no etc. De esta forma se generan contraseñas del tipo “YiHK;AK~]k2p”, no son fáciles de recordar pero tampoco de averiguar.

Usar la “ñ” puede provocar que la seguridad mejore ostensiblemente. Esto es debido a que no es un carácter que use todo el mundo, en países de habla inglesa la letra “ñ” no es usada.

Fuente: http://omicrono.elespanol.com